El Casabe

La yuca junto al maíz, fueron los principales cultivos de nuestros ancestros en la época precolombina. Es una de las plantas más antiguas cultivadas en el nuevo mundo, basado en las representaciones de arcilla de las raíces de la yuca de la costa del Perú, fechadas en 2000 años a.c. 

La palabra yuca proviene de casabi, nombre dado por los indios Arawacos a las raíces de yuca. De este cultivo se elabora el casabe, que es un pan ácimo, delgado y circular, a base de harina de yuca, posteriormente asado en un budare o plancha.

Como anteriormente comentamos este era un alimento de nuestros ancestros, por su fácil conservación y valores nutritivos. El casabe fue originalmente producido por los nativos americanos Arahuacos, Taínos y Caribes, estas raíces eran de una planta muy común en los bosques tropicales pluviosos donde ellos vivieron. La preparación consistía raspar la cáscara de la yuca con un rallo de madera dentado con piedrecillas afiladas, astillas de hueso, gruesas espinas de pez, etc., incrustadas y pegadas con resina. Este proceso reducía la yuca a pulpa, ésta se introducía en el llamado sebucán, especie de colador hecho de hojas de palma entretejidas. El sebucán (o cebucán) se colgaba de un árbol y allí debía soportar el peso de dos o más hombres sentados en él, hasta exprimirse bien todo el líquido venenoso de la masa. Luego la masa es tamizada en un cernidor, para luego elaborarse la torta de casabe en un fogón típico llamado Budare.

En Venezuela muchos grupos étnicos indígenas hacen casabe y permanece como alimento ó pan principal. Las comunidades indígenas como los Ye-Kuana, Kari-Ña, Yanomami, Piaroa, Guarao o Warao mantienen estas tradiciones.

El casabe en Venezuela tiene mucha variedad, ahora se puede conseguir en el mercado con un toque de ajo, ideal para reuniones que son servidos como acompañantes de cremas, como entremeses. También se popularizó un dulce, combinando el casabe, con papelón y queso conocido como naiboa.

Luego de la llegada de los españoles a nuestro territorio, el casabe fue considerado un alimento de pobres, y por un tiempo estuvo marginado. Pero actualmente es consumido en muchas zonas del país y más allá de nuestras fronteras.